La población soriana vuelve a salir a la calle para manifestarse en contra de la reforma laboral que supone una regresión de los derechos de los trabajadores y trabajadoras no vistos desde la democracia.
La reforma del PP y la anterior orquestada por el PSOE ponen a los trabajadores en una situación muy debilitada ante los ataques del capital y sus medidas, como ya demostró la anterior reforma, no servirán para crear empleo.
Si los y las trabajadoras no luchamos para frenar esta agresión, la precariedad laboral y las rebajas salariales agrandarán la brecha entre la clase trabajadora y los "amos del capital". Por ese motivo, el Partido Comunista celebra que la sociedad despierte ante esta nueva reforma y reivindique medidas más justas para tod@s.